Bueno pero ya en serio si es un lugar bonito, para quienes gozan de pueblear y entrar en las ruinas de lo q fuera una hacienda muy grande que se cuenta que el rey Nezahualcóyotl mandó a construir cerca del siglo XIV, el nombre de las flores no es porque hubiera flores, sino porque adopto el nombre de uno de los que fuera su dueño Alfonso Flores de Valadez.
Subiendo un cerrito te encuentras con la capilla del señor de la presa, bastante escondido pero si sigues a la gente o al ruido de un arroyo das sin problema, bueno pues al parecer esta hacienda fue muy prospera en cuanto a producción de harina de trigo, quien pero a la llegada de la revolución mexicana fue abandonada :(.
Habían restos de los guardianes prehispánicos que protegían el lugar ..... (choro)
La tía disfrutando del paseo con un alegre maui paseador ;)
Y pos claro obvio hay lugar para chacharear y comer a gusto ;) Recomiendo la visita para dominguear o una escapadita que deseen en familia, pareja, como os gusten.
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